La Presidenta de la Republica de Chile, Michelle
Bachelet, asistió recientemente a la conferencia anual del Clinton Global
Initiative en Nueva York y se sentó para hablar con el ex-presidente de EE.UU.
Bill Clinton. Aquí ella describió sus objetivos principales para su tiempo como
presidenta.
Bachelet habló sobre el crecimiento económico reciente
que ha estado pasando por los últimos 20 años, y Clinton alabó a Chile por tener
la economía mas fuerte en todo de Latino América. Sin embargo el crecimiento
económico no es suficiente para Bachelet. Ella observó que mientras Chile es seguramente
fuertísimo económicamente, hay muchos aspectos sociales en su país que
necesitan ser arreglados, específicamente la gran desigualdad que existe allí.
Un gráfico del crecimiento del PIB en Chile desde 1980 hasta una proyección de 2018.
Ella argumenta que el crecimiento económico y PIB
per cápita no son medidas suficientes del desarrollo de un país. Ella cree que la
igualdad, la inclusión, la justicia social y los derechos humanos sirven como
marcadores mejores de éxito, y ella planea concentrarse en estas cosas.
La forma en que ella planea lograr sus metas es a
través de la reforma educacional, nuevas políticas e impuestos. Su proyecto de
impuestos cae fuertemente en los hombros del diez por ciento más rico de la
población, pero contará por tres porciento del PIB de Chile. Estos fondos van a
ser usados para añadir un sistema de educación más fuerte e integrado.
Finalmente, ella planea abrir trabajos a mujeres y crear trabajos decentes para
todos los ciudadanos chilenos durante su presidencia.
Como una estudiante en la universidad, me concentro
en el desarrollo internacional, y estoy de acuerdo completamente con las ideas
de Bachelet. La estabilidad económica es una de los aspectos más importantes de
un estado estable y desarrollado. Sin embargo, no es el único indicador del
éxito de un país y no debe ser el único elemento en lo que la comunidad
internacional debe concentrarse. Muchos elementos son más importantes,
incluyendo política, salud pública, educación y seguridad. Pero estas son sólo alcanzables
por países un poco más desarrollados, porque sólo pueden tener buenos sistemas
de salud pública o educación cuando tienen un fondo de economías seguras y
políticas estables.
Su argumento principal, cuando ella
dijo “El desarrollo no se define sólo
con altas cifras de PIB per cápita: es crecimiento sustentable, inclusión,
cohesión social y gobernabilidad” es muy acertado y se puede demostrar con
ejemplos reales en el mundo. Por ejemplo, muchos países en el Medio Oriente y
África del Norte, como Arabia Saudita,
Libia y Irak, tienen mucho dinero de petróleo y, por eso, PIBs muy altos.
Sin embargo, las condiciones de vida en estos países no pueden ser clasificadas
como iguales o justas, y por eso, desarrolladas completamente.
Una representación de la pobreza que existe en Chile.
Usando el
estándar usual de PIB, estos países serían considerados muy desarrollados-
incluso más que Chile. Pero no es correcto decir eso, porque los ciudadanos de
estos países no disfrutan los mismos derechos que los de Chile. También, hay
casos donde un país tiene una población muy grande y como consecuencia, un PIB muy alto, pero no es representativa de una economía justa o un sistema igual.
En Brasil y India, por ejemplo, hay una gran desigualdad entre los más ricos y
los más pobres, con menos en el medio. Por eso, el PIB puede estar inflado,
pero no es una reflexión de la felicidad de la población.
En
conclusión, las
ideas de Bachelet son importantes y geniales. Es sorprendente para mí que ella
no sólo confía en el éxito de su primer mandato como presidente o en el
crecimiento de la economía, sino que ella está continuando la lucha por la
igualdad en toda la sociedad, especialmente para mujeres y en el lugar de
trabajo. Hubiera sido fácil para ella enfocarse en los logros de su país en la
conferencia de Clinton Global Initiative. Sin embargo, es una conferencia que
se centra en los derechos humanos y cuestiones sociales, entonces fue una
maniobra muy inteligente para anunciar sus objetivos políticos sobre igualdad
aquí. Pero, Bachelet es una
socialista, entonces no es sorprendente que ella se preocupe de derechos humanos
e igualdad en la sociedad. Sin embargo, esta planea es todavía muy beneficial a
su país y yo espero que Chile será un ejemplo para el resto de los países
latinoamericanos.
¿Crees
que Bachelet puede realizar su meta o es sólo una idea ideológica que nunca va
a funcionar?
¿Qué
sugerirías a Bachelet para ayudarle realizar su meta de igualdad en el lugar de
trabajo para mujeres?
¿Qué
piensas que debemos hacer para reducir o eliminar diferencias sociales que
afectan las economías en todos de los sociedades en el mundo?